El mensaje Patriarcado de la fiesta de Resurrección 2009

Hermanos e hijos, Cleros y pueblo en todo el mundo
La paz y la bendición para ustedes de El Señor, y felicitaciones para todos ustedes por la fiesta de la gloriosa Resurrección.
Y la resurrección de El Señor nos enseña varias lecciones útiles que nunca olvidaremos:
La primera lección que no hay imposibilidad, y que todo es posible en Dios.
La segunda lección que Jesucristo siempre hacía en su resurrección para nosotros: en primer lugar eliminó el miedo y el sospecho que tenía los discípulos, y los tranquilizó y cultivó en ellos la fuerza de la fe. Y después les otorgó la bendición del sacerdocio y dijo a aquellos discípulos como me envió el Padre, así también yo os envío, y sopló en sus rostros y les dijo Recibid el Espíritu Santo A quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan retenidos. También prometió los discípulos con la predicación y la enseñanza diciéndoles: »proclamad la Buena Nueva a toda la creación« y también les dijo Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado, también pasó con ellos 40 días hablándoles de los asuntos relacionados con el reino de Dios. Y en este periodo les entregó todo lo que nos llegó atreves de la tradición apostólica y de lo más importante todo lo relacionado con los sacramentos y el orden de la iglesia.
Y en Su resurrección y Su aparición para ellos, los cambió del miedo al atrevimiento y en aquel entonces pudieron decir a los líderes de los judíos (Dios debe ser obedecido más de la gente) y les explicó todo lo que se trata de Él en el Namus de Moisés (la Ley de Moisés), los profetas y los Salmos.
Y después de eso se separó de ellos y subió al cielo, y les envió el Espíritu Santo en forma de lenguas de fuego que se descendió sobre ellos, entonces hablaron en lenguas y pudieron predicar Su Nombre en todo el mundo, y después también les concedió muchos dones de El Espíritu Santo que les ayudó a los labores de la predicación y el cuidado. Y no le es suficiente sino les dijo Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.
Un tiempo después del Su ascenso volvió apareciendo a Saúl Trsusi quien perseguía la iglesia y pudo convertirlo a uno de los grandes apóstoles quien más se cansó que todos ellos en difundir la fe.
Y lo que hizo Jesucristo con sus apóstoles después de de la resurrección sigue haciendo hasta ahora en su iglesia. Y esto con la bendición y el acto de El Espíritu Santo. ¿Que no es ÉL quien dijo: Mi Padre trabaja hasta ahora, y yo también trabajo?. Le damos las gracias de todos sus hechos con nosotros, él es quien nos animó diciendo (Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos).
En todo esto vemos en la resurrección de El Señor y Su Labor ánimo para nosotros paraqué trabajemos y él trabaja con nosotros. Y por lo que se dijo de los discípulos de Cristo al final del evangelio de San Marcos (Ellos salieron a predicar por todas partes, colaborando el Señor con ellos y confirmando la Palabra con las señales que la acompañaban).
Finalizando, toda bendición para ustedes de El Señor, curados en El Señor y desatados por el Espíritu Santo.

El Papa Shenuda III
Abril 2009